Merkel enfatiza que la libertad no debe darse por sentada. Es un bien precioso que requiere ser defendido y conquistado por cada generación.
En sus memorias, Libertad, Angela Merkel comparte un relato íntimo y reflexivo sobre su vida personal y política, marcada por su infancia en la República Democrática Alemana (RDA), una dictadura comunista. Durante 35 años vivió en un sistema que restringía las libertades, lo que definió profundamente su visión de la democracia y su compromiso con la defensa de la libertad como un valor esencial.
¿Por qué no dice "soy feminista", sin adjetivos?
Porque el feminismo, tal y como se había desarrollado en Alemania y quizá también en otros países europeos, era un feminismo que a menudo estaba vinculado a ideas socialistas sobre la so-ciedad. Era un feminismo que a menudo enfrentaba a hombres contra mujeres. Y ese no era ni es mi tipo de feminismo.
La libertad
Merkel enfatiza que la libertad no debe darse por sentada. Es un bien precioso que requiere ser defendido y conquistado por cada generación. En su libro, argumenta que la libertad no solo implica derechos individuales, sino también respeto mutuo, tolerancia y la capacidad de llegar a consensos. Para ella, estas cualidades son fundamentales para mantener una democracia fuerte y resiliente.
A lo largo de su obra, advierte sobre los riesgos actuales para la libertad, como el auge del populismo, la polarización extrema y el impacto negativo de las redes sociales, que tienden a simplificar los debates y eliminar los matices en favor de visiones absolutas. Merkel ve estas tendencias como una amenaza para los valores democráticos, subrayando la necesidad de proteger las instituciones que garantizan derechos y libertades.
Tengo 70 años ahora y el tema de la libertad ha sido una constante en mi vida. Durante los 35 años que vivi en la RDA eché de menos la libertad, pero mis padres me la dieron en el ámbito de la familia. Al escribir este libro, he podido mirar atrás, a esa época en la que no existían libertades en el ámbito del Estado. Hoy, después de la euforia de 1989 y 1990, observo que vuelven a existir partidos y corrientes políticas que intentan restringirlas. Por eso creo que hay que luchar por el valor de la libertad, que tenemos que repetirle a cada generación que es algo valioso, que no se la puede dar por sentada, que hay que ganársela una y otra vez. La libertad incluye el respeto a los demás. la tolerancia, la capacidad de llegar a consensos. Todo esto hay que practicarlo una y otra vez, en cada generación. Entrevista con El País
El pragmatismo
Reconocida por su enfoque racional y metódico, Merkel lideró Alemania durante momentos críticos, como la crisis financiera de 2008, la crisis migratoria de 2015 y la pandemia de COVID-19. En sus memorias, detalla cómo su formación como científica moldeó su capacidad para tomar decisiones basadas en datos y consenso, priorizando soluciones duraderas sobre respuestas rápidas.
Su decisión de abrir las fronteras a más de un millón de refugiados en 2015 es un ejemplo de su liderazgo ético. Aunque generó divisiones políticas, Merkel defendió esta medida como un acto de responsabilidad y humanidad. Este equilibrio entre empatía y pragmatismo define su legado político.
Relaciones
En el libro, Merkel comparte anécdotas reveladoras sobre sus interacciones con líderes como Donald Trump y Vladimir Putin. Describe a Trump como un político que ve las relaciones internacionales como un juego de "ganadores y perdedores", en contraste con su creencia en el beneficio mutuo y la cooperación, principios fundamentales de la Unión Europea.
Sobre Putin, recuerda un incidente en el que intentó intimidarla soltando a su perro durante una reunión, una acción que interpretó como una demostración de poder. Estas experiencias reflejan los desafíos de lidiar con líderes autoritarios y cómo su firmeza y autocontrol definieron su enfoque diplomático.
Angela Merkel reflexiona en sus memorias sobre sus experiencias con Donald Trump y Vladimir Putin. Destaca que Trump tiene una visión basada en "ganadores y perdedores" en lugar de buscar soluciones de beneficio mutuo (win-win), lo cual contrasta con principios fundamentales como la cooperación en la Unión Europea. Trump, según Merkel, prioriza el fortalecimiento de su propio país, a menudo a costa de otros, bajo la filosofía de "Make America Great Again".
En cuanto a Putin, Merkel relata un incidente en el que él intentó intimidarla soltando a su perro, una acción que interpretó como una demostración de poder. También menciona cómo Trump parecía fascinado por líderes con tendencias autoritarias.
Alemania
Merkel reflexiona sobre su vida en la RDA y cómo esa experiencia moldeó su comprensión de la libertad. Admite que ser una mujer de origen oriental marcó su carrera, pero siempre intentó liderar como canciller de todos los alemanes. Aunque logró avances significativos, reconoce que la unidad entre el Este y el Oeste sigue siendo un desafío pendiente para Alemania.
Un legado
Las memorias de Angela Merkel no solo son un relato de su vida, sino una reflexión profunda sobre el liderazgo y la política. Su estilo, alejado del narcisismo y la teatralidad, se centró en el trabajo constante, la integridad y el servicio al bien común.
En última instancia, Libertad es tanto un testimonio de su vida como una advertencia sobre los riesgos actuales para la democracia y un llamado a valorar y proteger las libertades que, como ella enfatiza, nunca deben ser tomadas como algo garantizado.
Con info de El País
Anitzel Díaz
Leer más
A pesar de las diferencias entre las versiones de izquierda y derecha en cada región, todos estos movimientos populistas comparten algunas características comunes: se presentan como la voz del "pueblo" frente a unas élites que consideran corruptas o desconectadas.
Comments