De acuerdo con la secretaría de seguridad ciudadana de la capital, los ciberdelincuentes están concentrando sus ataques en los adultos mayores.
La razón, que muchos no tienen gran experiencia en internet y redes sociales. Los delitos más comunes contra mayores de 60 años son el fraude, con el 52 por ciento de los casos… el acoso cibernético con 19 por ciento. La extorsión también con 19 por ciento… y la suplantación de identidad con diez por ciento.
Los delincuentes se hacen pasar por empleados de banco, familiares o amigos. Buscan interactuar con la víctima para obtener información sensible, como nombres de usuario y contraseñas. También mandan ligas que contienen virus y roban los datos financieros. Hay que tener mucho cuidado.
El crecimiento y “éxito” de estos crímenes, ya sea vía telefónica, por internet o aplicaciones de mensajería instantánea, se debe a que los delincuentes atacan principalmente las emociones y sentimientos de las víctimas y se hacen pasar por familiares, amigos e incluso jefes o compañeros de trabajo.
“Los adultos mayores son un blanco fácil. Ellos crecieron en una generación donde esas tecnologías no existían y tienen miedo de usarlas. Como mayores han perdido capacidades visuales, auditivas, motoras e incluso de memoria, lo que provoca que les cueste más trabajo usar las nuevas tecnologías”, aseguró el especialista en entrevista.
Alfredo Sastré señala que los adultos mayores utilizan las plataformas digitales principalmente para sentirse queridos, atendidos y estar cerca de sus familiares y amigos, por lo que utilizan computadoras y teléfonos inteligentes para acceder a sus correos electrónicos, aplicaciones de mensajería instantánea, leer y mantenerse informados y es ahí cuando pueden ser víctimas de ataques o fraudes cibernéticos.
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