top of page
  • Admin

Contaminación medioambiental causa más muertes en el mundo que el coronavirus

Esto lo sabemos gracias al reciente informe de la Comisión de Contaminación y Salud presentado en The Lancet, que reportó que los diferentes tipos de contaminación son los responsables de unas nueve millones de muertes al año, en contraste con las seis millones que se han registrado oficialmente por COVID-19.


Este dato es más que abrumador, ya que representa una de cada seis pérdidas a nivel global y es mayor a la suma de todas las muertes en 2019 causadas por guerras, terrorismo, sida, tuberculosis, malaria, drogas y alcohol.


La contaminación fue responsable de la muerte prematura de nueve millones de personas el 2019, cuatro años después de un primer informe, la situación no ha mejorado: alrededor de una de cada seis muertes prematuras en el mundo está asociada a la contaminación, señaló la Comisión sobre Contaminación y Salud de Lancet.


La contaminación y los desechos expulsados al aire, el agua y el suelo no suelen matar directamente, pero son causantes de graves enfermedades cardíacas, cáncer, problemas respiratorios y diarreas agudas.

"Los efectos sobre la salud son enormes y los países de ingresos bajos y medios son los más afectados", resumió el autor principal del estudio y codirector de la comisión, Richard Fuller.


Son responsables de 92 % de esas muertes y de la mayoría de las pérdidas económicas.

El 2019, 6.7 millones de muertes prematuras son atribuibles a la contaminación del aire, 1.4 millones a la contaminación del agua y 900,000 a la intoxicación por plomo.


México


En septiembre, la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio a conocer ajustes drásticos sobre las pautas para la calidad del global del aire y es que se calcula que la exposición del aire contaminado provoca 7 millones de muertes prematuras y afecta a millones de personas.


La organización también dio a conocer que, este tipo de contaminación, es comparable a otros riesgos para la salud como la dieta no saludable y el tabaquismo.


El cambio en las pautas puso en jaque a la Ciudad de México, ya que si de por si los parámetros utilizados para determinar la calidad del aire nunca han sido demasiado rigurosos, ahora ante los ojos de la OMS estamos “reprobados” según las nuevas normas establecidas.


“Las normas en México son bastante laxas en comparación con las guías internacionales”, afirma Ricardo Torres investigador del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático de la UNAM, para el periódico El País.




8 visualizaciones0 comentarios
bottom of page