Durante la mañanera, el subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, descartó que el multihomicidio en San José de Gracia, Michoacán, se haya tratado de un fusilamiento, afirmó que se debió a rencillas entre integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación.
El funcionario dijo que muchos de los asesinados se presumen que eran acompañantes Alejandro “N”, El Pelón, integrante del CJNG que también fue ultimado en el lugar.
Mejía Berdeja sostuvo que el móvil del crimen fue una venganza de Abel “N”, alias El Toro o El Viejón, en contra de El Pelón, ambos integrantes del CJNG, y quienes mantenían rencillas de hace tiempo.
Explicó que la rencilla entre ambos criminales se dio con el ascenso de El Viejón como jefe de plaza en el grupo delictivo, lo que provocó diferencias entre los dos sujetos. Reproductor de vídeo Recordó que en 2018 el hermano de El Pelón fue plagiado y asesinado presuntamente por órdenes de El Viejón, mientras Alejandro “N” se encontraba recluido.
Posteriormente, en diciembre de 2021, Alejandro “N” tomó venganza y asesinó a José “N”, hermano de Abel “N”, lo que provocó que éste amenazara a Alejandro “N” de asesinarlo si se le veía en San José de Gracia.
Añadió que el pasado domingo cerca de las 15:30 horas, Alejandro “N” llegó al velorio de su madre acompañado de al menos 15 sicarios, lo que fue cuestionado por otras personas debido a la amenaza existente en su contra.
A los pocos minutos llegan camionetas, con El Viejón al frente, y someten a los acompañantes, los desarman y los colocan afuera de una casa en un portón”, detalló. Pese a que Alejandro “N” realizaba llamadas para, supuestamente, evitar la confrontación, Abel “N” fue quien, de acuerdo con testigos, disparó contra El Pelón y así inició la refriega contra el resto de personas sometidas.
Mejía Berdeja afirmó que las autoridades municipales de San José de Gracia no alertaron sobre los hechos, sino que la Fiscalía de Michoacán da el aviso una vez que se origina la noticia del crimen.
Además, calificó como “atípico” que los sicarios llevaron mangueras y otros materiales para limpiar en la calle la sangre derramada tras la refriega.
El subsecretario de la SSPC aclaró que si bien al momento no hay certeza ni un número sobre las víctimas, ya hay una denuncia anónima que reportó algunos lugares donde podrían haberse dejado los cuerpos.