EZLN denunció ataques de grupo paramilitar y advirtió que Chiapas está al borde de una guerra civil
El pasado 22 de mayo integrantes de la Organización de Cafeticultores de Ocosingo (Orcao) perpetró un ataque armado en la comunidad Moisés Gandhi del municipio autónomo Lucio Cabañas, territorio en donde ha regido el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) a lo largo de décadas.
Aquella agresión no solo dejó gravemente herido al compañero Jorge López Santíz, sino que también marcó un capítulo más de un conflicto de raíces históricas que contemplan como protagonistas al movimiento que se levantó en el estado de Chiapas en 1994 y al grupo paramilitar que desde hace años amenaza a las comunidades autónomas zapatistas.
800 organizaciones, colectivos y personalidades firmaron un comunicado en el que piden el cese a las agresiones en territorio zapatista, piden justicia para Jorge López Santíz,quien resultó herido en uno de los ataques, la disolución de la ORCAO.
Está en curso una campaña de denuncia y movilizaciones dentro y fuera del país con la consigna de poner un alto a la guerra contra las comunidades zapatistas. El pasado 31 de mayo se difundió un Pronunciamiento nacional e internacional ante la agresión a la comunidad Moisés Gandhi, signado por más de mil personas de los ámbitos intelectuales, artísticos, académicos y dos centenares de organizaciones de México y otros países.
El pronunciamiento retoma el análisis y denuncia del que emitió la dirigencia del EZLN. Su tesis central: Chiapas está al filo de la guerra civil con paramilitares y sicarios de los cárteles que se disputan la plaza y grupos de autodefensas, con la complicidad activa o pasiva de los gobiernos de Rutilio Escandón Cadenas y Andrés Manuel López Obrador. Y destacan la trayectoria y empeño zapatista por construir la autonomía y fortalecer el carácter civil de sus juntas de buen gobierno. Colocan un punto central que debería llevar al gobierno federal a acercar la lupa en sus programas, en la legitimidad de sus reglas de operación, si es que los asume sólo como sociales, y no como mecanismos, como en este caso, abiertamente contrainsurgentes. Se trata de que la Orcao con su violencia constante pretende despojar a los zapatistas de las tierras que recuperaron en el levantamiento de 1994, entre otros objetivos, para cobrar los apoyos gubernamentales del programa Sembrando Vida.
En el comunicado difundido también por múltiples organizaciones civiles y defensoras de los pueblos indígenas se detalla que a lo largo de los años el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) ha intentado mantener la paz y ha desarrollado su proyecto autonómico en sus territorios con el objetivo de evitar el choque violento con para militares y otras fuerzas del Estado mexicano, sin embargo, el movimiento ha sido hostigado, agredido y provocado constantemente.
De este modo y para visibilizar su lucha, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) convocó a una manifestación el próximo 8 de junio, la cual en la Ciudad de México se llevará a cabo entre el Ángel de la Independencia y el Zócalo capitalino, no obstante, se espera que colectivos y organizaciones defensoras de los pueblos indígenas se sumen a la protesta desde otros puntos de la República Mexicana.
Comunicado